jueves, 14 de marzo de 2013

8 de agosto de 1974 ... Nixon dimite tras el escándalo watergate

Richard Nixon (1913-1994) toma posesión de la presidencia de EEUU, en enero de 1969. Lo hizo en un país sacudido por grandes tensiones socieles tanto por la impopular Guerra de Vietnam, como por las políticas aperturistas de Johnson hacia los derechos sociales, sobre todo en los estados sureños. Su lema, "Ley y orden", busca acabar con esas tensiones . En este sentido pronuncia su famoso discurso, llamando a la "mayoría silenciosa" de 1969. Su política se centra en 2 objetivos: retirada de los 500.000 soldados que sirven en Vietnam, y búsqueda de un nuevo equilibrio internacional (apertura de negociaciones de desarme con URSS, y relaciones con la República Popular China, que culminará con la inclusión de ésta última en el Consejo de Seguridad de la ONU en sustitución de Taiwán).

La percepción popular de su 1º mandado fue muy positiva, lo que le valió una aplastante reelección en 1972. Sin embargo, la medidad iniciadas en su anterior legislatura, fueron fracasando finalmente en este segundo mandado. En Vietnam, la retirada de las tropas se fue acompañando de bombardeos masivos contra la población civil, intentado forzar la rendición de Vietnam del Norte. Lejos de esto, el conflicto se extendión a Laos y Camboya. En América, su apoyo al golpe militar de Augusto Pinochet contra el presidente chileno Salvador Allende (11 de septiembre de 1973), extendió su compliciudad con el resto de gobiernos golpistas del Cono Sur y sus políticas represivas. Y finálmente, el golpe de gracia su mandato, fue el caso Watergate.

El 17 de junio de 1972, 5 hombres son arrestados por allanamiento de morada de la sede del Comité Nacional del Partido Demócrata en el complejo de oficinas Watergate, en Washington D.C. Uno de ellos, James McCord, era Director de seguridad del "Comité para la reelección de Nixon", además de trabajar en el FBI y la CIA (donde era jefe de seguridad de su sede el Langley). los otros 4 hombres eran agentes de la CIA.
En el Washington Post, 2 periodistas, Carl Bernstein y Bob Woodward (el escritor inglés Adrian Havill, escribió que Woodward, antes de periodista, fue agente de la CIA), iniciaron una investigación del caso, ayudados por un confidente secreto que se llamo "garganta profunda" (en 2005, éste reveló su identidad a la revista Vanity Fair; se trataba de W. Mark Felt, antiguo director adjunto del FBI bajo la presidencia de Nixon).

Poco después se descubrió que los 5 acusados fueron contratados por Howard Hunt y Gordon Liddy, vinculados al "Comité de Reelección del Presidente". el 15 de septiembre , los 5 acusados más Hunt y Liddy, fueron imputados por conspiración, robo y violación de las leyes federales. los 7 fueron condenados en enero de 1973, pero la investigación continuó, creyéndose que los hilos apuntaban más arriba.

En marzo de 1973, James MCCord envió una carta al juez encargado del caso (John Sirica) relatando como era presionado para declararse culpable y acusando a varios oficiales del gobierno. Todos estos hechos hicieron que se formara una comisión de investigación en el Senado. Las investigaciones sacaron a la luz la práctica habitual de una red de escuchas que incluían las conversaciones en la misma Casa Blanca, así como numerosas mediad ilegales como sobornos, espionaje, entradas ilegales en ofivinas, auditorías falsas, etc. 

Nixon abandona la Casa Blanca tras su dimisión

Ante la segura condena, Nixon dimitió del cargo, el 8 de agosto de 1974, cediendo el cargo a su vicepresidente Gerald Ford, cuya primera medida fue indultar a Nixon de los cargos, con lo que la investigación se paró. 

jueves, 7 de marzo de 2013

2 de octubre de 1187 ... Saladino conquista Jerusalén

El 2 de octubre de 1187, Saladino ocupa Jerusalén, capital del reino latino del mismo nombre, lo que precipita la creación de la III Cruzada.
El origen de las cruzadas es muy anterior, surgiendo en el siglo XI. En Europa se ha consolidado el orden feudal. Se ha superado el periodo de las invasiones vikingas, y la idea de la "paz de Dios", está cristianizando a la caballería. Todo esto hace que Europa tenga un potencial latente de violencia que necesita extravasar al exterior. Además el cerrado sistema de herencias por linaje del sistema feudal, deja a muchos miembros de familias nobles sin posibilidades de prosperar y alcanzar poder su su tierra, y necesita buscar nuevas metas.
Esto coincide con un periodo en que se está empezando a progresar en el Mediterráneo occidental, a costa de los poderes musulmanes (en España, la reconquista progresa, mientras que Corcega y Cerdeña son ocupadas por genoveses y pisanos en el segundo tercio del siglo XI, etc.). Es en este momento, cuando a través de los Prineos, empieza a calar el concepto de cruzada contra el infiel traido por los caballeros franceses.
En el plano religioso, estamos en Plena Edad Media Occidental. Es un momento en que toma peso el concepto de "homo viator", hombre que camina por la vida  hasta alcanzar el reposo definitivo de su ser en el Mas Allá, y que se plasma en las peregrinaciones a los lugares santos (Santiago de Compostela, Roma, o diversos centros regionales) y como lugar por excelencia, Jerusalén.

Concilio de Clemont




En este contexto, Urbano II, el Papa, ve una forma de consolidar su poder temporal en toda la cristiandad, aunando las asperaciones espirituales, políticas y aventureras de toda la cristiandad, en un objetivo común: la toma de los lugares santos para la cristiandad.

La ocasión se presentó en 1095, cuando el emperador de Bizancio, Alejo I, solicitó en envío de mercenarios europeos para luchar en su ejército contra los turcos (la idea que que solicitó ayuda para frenar la expansión islámica en forma de peregrino o en lo que sería la Cruzada, hoy difícilente se mantiene (Ladero Quesada, 1987)). En vez de esto, Urbano II, convocó el concilio de Clemont, el 25 de noviembre de 1095, llamando a recuperar Jerusalén. A su llamada acudieron nobles de diversas tierras (aunque franceses en su mayoría). Nombró a Ademaro de Monteil como legado papal para la expedición, designó como símbolo una cruz roja en el hombro para los peregrinos, y procuró que las autoridades aclesiásticas garantizasen el respeto a las familias y bienes de los que habían de confluir en Constantinopla.
Mientras se organizaba la "cruzada de los señores", varios predicadores, como Pedro El Ermitaño o Emich de Leisingen, organizaban la "cruzada de los pobres". Se formaba por gente si organización ni preparación, pero con un profundo misticismo y religiosidad, protagonizando grandes excesos durante su viaje a través de Bulgaria, hasta Constantinopla, donde se les facilitó el paso a Asia Menor, donde fueron masacrados por los turcos.
La llegada de la "cruzada de los señores" a Constantinopla ocurrió a finales de 1096. Alejo I, logró una juramento de fidelidad de los fejes cruzados (excepto Bohemundo de Tarento que no lo hizo hasta 1107), así como su compromiso de entregar los territorios recuperados al imperio o mantenerlos como feudos del mismo. La cruzada se inició con el paso a Asia Menor y la ocupación de Nicea en junio de 1097, y se puede dar por concluida con la ocupación y consitución como reino, de Jerusalén, en el año 1100. Al mismo tiempo, se fundaron varios estados cruzados a lo largo de esos primeros años:
  • Reino de Jerusalén (1099-1291, desaparece tras la caída de Acre). Tiene varios territorios vasallos:
    • Principado de Galilea
    • Condado de Jaffa y Ascalón
    • Señorío de Transjordania
    • Señorío de Sidón
  • Condado de Edesa (1098-1144)
  • Principado de Antioquía (1098-1268)
  • Condado de Trípoli (1104-1288)
Aunque con la conquista de Jerusalén, muchos de los caballeros volvieron a sus casas, haciendo inviable la consolidación de las conquistas con un territorio suficiente (de hecho, siempre tuvieron la amenaza de Siria y Egipto, pero una campaña que hubiese culminado con la ocupación de Siria hubiese facilitado la estabilidad de los reinos cruzados), mientras Siria y Egipto no estuvieron unificados en un solo proyecto (ni siquiera Siria estaba unificada en un solo poder), y mientras tuvieron el apoyo de las flotas de los estados italianos y la afluencia de peregrinos armados, se pudo mantener los dominios.

Sin embargo, en 1154, Zengí y su hijo Nur al-Din ocupan Damasco y unifican toda Siria. La primera consecuencia es la caída del reino cruzado más expuesto, Edesa, que cae entre 1144 y 1146. La respuesta es la petición de ayuda por el rey de Jerusalén Balduino III. Se organiza la II Cruzada en 1146, al mando del emperador Conrado III y Luis VII de Francia. La cruzada es un fracaso que no logran ningún objetivo.
En 1174, Saladino, unificaba Siria y Egipto en un solo reino, aunque siempre tuvo la oposición de poderes menores dentro del Islám (de hecho, para poder tener la autorización del cálifa abbasí de Bagdad (teórico jefe supremo de todo el Islám), debió justificar que el Sultán de Siria, obstaculizaba la conquista de las tierras cruzadas, y que el se comprometía a devolver Jerusalén al Islám). A partir de ese momento la presión hacia los territorios cruzados fue en aumento. El nuevo rey Balduino IV (1174-1186) dedicó todo su reinadp a intentar mejorar la defensa y coordinación de todas las fuerzas cruzadas, además de lograr más apoyos exteriores. Sin embargo, a su muerte, Saladino destruyó completamente al ejército cruzado en la batalla de Hattin (julio de 1187), capturando a casi todos los jefes cruzados, incluido el nuevo rey Guido de Lusignan. El más alto cargo que logra escapar es Balian de Ibelín. Saladino pone de inmediato sitio a Jerusalén. Balian, que no se encuentra en Jerusalén, pide a Saladino autorización para acudir allí buscar a su mujer e hijos. Saladino acepta pero con la condición de que no permanezca en Jerusalén más de un día y que no tome las armas contra él. Sin embargo, cuando llega a la ciudad, el patriarca Heraclio le reconoce y le pide que lidere la resistencia. Balian pide autorización a Saladino para romper su juramente y éste acepta.
Balian organizó una defensa desesperada pero muy efectiva. Al final, la aplastante superioridad de las tropas islámicas, se impone. Cuando ya todo parece perdido, Balian acude a ver a Saladino para proponerle entregar la ciudad a cambio de la inmunidad de sus habitantes, pero, dada la situación, Saladino no lo ve necesario y no acepta. Además, mientras negocian, un estandarte islámico se iza en un baluarte de Jerusalén. Balian amenaza con destruir completamente toda la ciudad antes de perderla. Ante esa amenaza, Saladino acepta la entrega de la ciudad pero pide que se pague un precio por cada ciudadano que se libere. Todos los habitantes de Jerusalén que pudieron, pagaron por su liberación. Además, tanto Balian como muchos habitantes con dinero pagaron por los que no tenían. Incluso, el mismo Saladino y muchos nobles islámicos pagaron el rescate de otros muchos como agradecimiento a Alá por la victoria.
Tras la caída de Jerusalén, siguieron la gran mayoría de las plazas cruzadas, excepto Tiro, donde se organizó una gran defensa y se refugiaron muchos habitantes de los territorios que habían caído. 

sábado, 2 de marzo de 2013

1 de octubre de 1578 ... Muere en Namur Juan de Austria

Don Juan de Austria (1547-1578) era hijo ilegítimo del Emperador Carlos I de España y V de Alemania, pese a lo cual, éste se ocupó de que su sucesor, Felipe II, le incluyera en la familia real. Así, sus primero años los pasó en Leganés (Madrid), a cargo de un violinista de la corte imperial y su mujer española, a cambio de una pensión anual. En 1554, fue trasladado a Villagarcía de Campos, en Valladolid, para mejorar su educación a cargo de don Luis de Quijada y Magdalena de Ulloa, a los cuales, Don Juan siempre tendría gran cariño.

Tras la muerte de Calos I en 1558, Felipe II se hace cargo de su hermanastro y tras incluirlo en la familia real, ordena que acuda a la Universidad de Alcalá de Henares (Madrid) para completar su educación, junto a su sobrino, el príncipe Carlos, y su otro sobrino, Alejandro Farnesio, hijo de Margarita de Parma, otra hija ilegítima de Carlos I. Los 3 jóvenes (tenían edades muy parecidas), se hacen grandes amigos, y de hecho, con Alejandro Farnesio, combatirá en numerosas batallas.

En 1568, es nombrado Capitán General de la Mar y Comandante de la Flota del Mediterráneo. Ese año llevó a cabo una brillante campaña contra los corsarios berberiscos. Sin embargo, en Madrid mueren el príncipe Carlos y la reina Isabel de Valois, con la que Don Juan tenía una profunda amistad. Don Juan lleva la flota puerto y va a Madrid, sumiéndose en una depresión.

Sin embargo, en 1569, Felipe II le llama para ponerse al mando de las tropas en la rebelión de las Alpujarras. Don Juan aplasta la rebelión. Mientras, en Europa se discute la creación de una alianza para oponerse a la flota turca, que en ese momento el el mayor poder militar del Mediterráneo oriental y amenaza con seguir avanzando. Así, en 1571, Don Juan toma el mando de la Santa liga, cuya flota se forma con barcos españoles, venecianos, de la Santa Sede y de la Orden de Malta. Reunido el Consejo de Guerra, se decide tomar una actitud ofensiva, buscar la flota turca y atacarla allá donde esté. Así, el 7 de octubre de 1571, la armada de la Santa Liga, destruye completamente a la flota turca en el golfo de Lepanto (oeste de Grecia). También se ocupa temporalmente Túnez.

En 1576, fue nombrado Gobernador General de los Países Bajos. Allí, la guerra se enconaba y no se veía la forma de resolverla. Tras la mano dura del Duque de Alba que solo había extendido más la rebelión, llegó la actitud conciliadora de Luis de Requesens. Sin embargo, éste muere y el cargo queda vacante. Don Juan llega a los Países Bajos intención de negociar para llegar a la paz. El 17 de febrero de 1577, firma el Edicto Perpetuo, por el que se logra la paz y su reconocimiento como Gobernador General, a cambio de retirar a loa tercios del territorio.

Sin embargo, en verano, la situación se complicó y en septiembre, Guillermo de Orange, lider rebelde, plantea un ultimatum, pidiendo la retirada de todas las tropas españolas y la entrega de las ciudades. Don Juan gana tiempo mientras llama de nuevo a los tercios, que se encuentran en Milán. Estos acuden al mando de Alejandro Farnesio a través del Camino Español y el 31 de enero de 1578, destrozan al ejército rebelde en la batalla de Glenboux. Sin embargo, la falta de apoyo decidido de la corona y lo complicado de las operaciones, hacen que la campaña se alargue. Don Juan enferma de tifus. Consciente de la gravedad de su estado, nombra como sucesor a Alejandro Farnesio, acto que después aceptará Felipe II, y muere en Namur, el 1 de octubre de 1578.

Don Juan demostró a lo largo de su vida una gran ambición así como unas innatas dotes de mando, así como un gran sentido estratégico y capacidad diplomática. De no haber muerto tan joven, podría haber si do una gran valor para la monarquía.